Añadimos un poco de sal y pimienta negra molida. Otro punto clave es freírlas de puñado en puñado, de a poco, a fin de que la temperatura del aceite no baje y queden bien crujientes. De vez en cuando vamos separándolas con la espátula a fin de que no se peguen entre sí, hasta que tengan un bonito color dorado y estén crujientes. Recibir un correo con los siguientes comentarios a esta entrada. 7.- Servimos con un toque de perejil picado por encima y listo. Mondar y cortar las patatas en rodajas gruesas, freír en abundante aceite hasta el momento en que estén casi hechas, eliminar el exceso de aceite y reservar.
Vamos removiendo todo para que se vaya calentando de forma homogenea. Sigue estando igualmente bueno, aunque sean recortes menos bonitos. Pero si tenéis bacalao salado en el hogar, tenéis que desalarlo un día antes dejándolo en remojo y cambiándole el agua cada 8 horas (en función del tamaño del bacalao).
Empezamos picando la cebolla muy fino y poniéndola a sofreír a fuego retardado en una sartén con aceite de oliva cubriendo el fondo. Me despido ahora, les espero mañana en la próxima receta que publicaré aquí, en Cocina Familiar. Para desalar el bacalao, el pescado deben quedar cubierto de agua abudantemente. En el momento en que esté listo el sofrito, agregamos el bacalao desmigado. Es muy habitual en casi todo el territorio portugués, siendo entre las recetas con bacalao mucho más reconocidas de la cocina lusa.
Bacalao Dorado
Un vez desalado vamos a cocerlo unos minutos y lo vamos a desmigajar a tamaño similar a las patatas paja (debe haber un equilibrio entre cantidad y tamaño de patatas paja y bacalao). 4.- Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas. Las doramos un tanto en aceite y las ponemos en una fuente de horno con la cebolla pochada en el fondo. Las ponemos en el horno 15 minutos previamente ya que la patata puede quedar dura y el bacalao va a tardar menos tiempo en hacerse.
Ahora vais a ver cuánto les gusta llevarlo a cabo y de qué manera disfrutáis de su gusto y textura. En muchos sítios del Sur además le llaman bacalhau dourado , pero por la zona de Lisboa y más bien en prácticamente todo sítio es el “Bacalhau à Brás”. Fue entre los primeros platos que aprendí a cocinar, con unos 12 o 13 años y comunmente hago un sofrito con ajo y cebolla para las migas de bacalao. En lo que se van haciendo las patatas y la cebolla, cortaremos el bacalao en bastoncitos un poco considerablemente más gruesos que las patatas. En el momento en que la cebolla comience a dorarse, colocaremos el bacalao en el interior de la sartén para rehogarlo durante 5 minutos aproximadamente. En el momento en que nuestro sofrito esté preparado, añadimos el bacalao y lo removemos un par de oportunidades a fin de que nos quede muy jugoso.
Mientras tanto, picamos fino los ajos y el perejil y doramos en una sartén con cuatro medidas de cuchara de aceite de oliva virgen plus. Poner la sartén al fuego con un chorrito de aceite, añadir las cebollas cortadas en juliana, espolvorear sal y dejar cocinar a lo largo de unos minutos. Aquí os dejo un vídeo con la receta de bacalao a la portuguesa con los pasos que hay que seguir para que os quede deliciosa y de rechupete. La receta es muy sencilla y con su color dorado y el crocante de las patatas paja es ideal para iniciar a los niños de la vivienda para que coman más pescado. Hoy, en Cocina Familiar con Javier Romero, os voy a educar a hacer bacalao dorado a la portuguesa, que originalmente lleva por nombre Bacalhau à Brás o Braz, dependiendo de dónde estés. Por lo que he podido ver, la terminación en «z» se debe al nombre de la persona que inventó el plato, el Senhor Braz.
Cuando los bordes estén dorados sacamos el huevo con la espumadera y dejamos descansar sobre un papel de cocina para evitar el aceite que sobra. Mientras realizamos la mayonesa de aceitunas negra. Primero deshuesamos las aceitunas y reservamos.Acto seguido, en un vaso mezclador agregamos el huevo, las aceitunas sin huesos, una pizca de sal.
A mí,lo que más me ha gustado es….la cazuelita.¡Me chifla! Recortar las patatas alargadas y muy finas, y freírlas en abundante aceite caliente. Mondar las patatas, lavar bien y secarlas con un papel de cocina.
Recetas De Temporada
Las clave para que salgan unas patatas paja caseras perfectas son sacarle bien el almidón, dejándolas en remojo con antelación y secándolas después realmente bien antes de freírlas en abundante aceite caliente. Con las cebolla apunto de tomar color le he añadidos las migas de bacalao y he rehogado un minuto. Corta la cebolla como mas te agrade, a mi me agrada rallada, ponemos en una sartén con 4 medidas de cuchara de aceite, removemos ocasionalmente, hasta el momento en que se nos pochen. Las dejamos en agua fría diez minutos, las secamos con un paño , y freímos hasta que estén crocantes. Colocar unas aceitunas sobre la bandeja, espolvorear toda la superficie con un chorrito de aceite de oliva y poner en el horno calentado anteriormente a 180 ºC hasta el momento en que esté «torrado».
El bacalo es un ingrediente muy polivalente y prueba de esto es la proporción de recetas de bacalao que tengo publicadas en Cocina Familiar. En una sartén ponemos el aceite de oliva para sofreír. Salpimentamos para dejarlo a nuestro punto. Recuerda que el bacalao, aunque esté desalado, prosigue preservando sal y lo va a haber soltado. En el momento en que estén medio doraditos, vamos a ir añadiendo los pimientos del piquillo y la cebolla cortados en juliana. Seguimos a fuego retardado para que no se nos queme nada.
Además de esto, el toque de horno le da ese punto de gratinado que lo realiza siempre y en todo momento apetecible, llenando la cocina del aroma a la crocante costra que la patata y la leche hacen. Mi Canal de YouTube, en el puedes observar un buen número de vídeos con recetas de cocina, suscríbete y recibe las noticias al instante. Hoy tenemos una receta de buñuelos de bacalao. Si pensábais (que lo más seguro es que no) que solo existían buñuelos dulces, eso va a cambiar a partir de ahora. Una vez probéis estos buñuelos de bacalao caseros, los vais a hacer una y otra vez en el hogar, así sea para una de las cenas diarias o como entrante en una celebración.
A mi como mucho más me gusta consumirlo es el bacalao al horno con patatas o el bacalao ajoarriero. Si queremos tomarlo de forma diferente tenemos la posibilidad de hacer unos exquisitos buñuelos de bacalao o una tortilla de bacalao. Como he comentado, una cantidad enorme de formas de llevar a cabo el bacalao.